Mirto. Una flor mediterránea.
Mirto: una flor muy próxima.
El mirto es una flor que florece en un pequeño arbolillo. No es una flor que sea de uso corriente en floristerías ni se cultive para su venta en ramos u otros arreglos florales.
Sin embargo su embriagador aroma hace que sea muy apreciada por muchas personas que la conocen. Utilizada desde tiempos remotos con esta y otras utilidades es originaria de la zona mediterránea y africana. Quizás no sepamos que la conocemos pero sin duda la hemos visto más de una vez. Vamos a enseñaros su historia y sus características.
Mirto, arrayán o murta.
Estos son los nombres con los que conocemos a este árbol. La primera es un derivado del nombre latín myrtus derivada a su vez del griego μύρτος.
La tercera de ellas, murta, tiene el mismo origen, pero a lo largo del tiempo evolucionó de forma diferente para convertirse en este vocablo.
Por último arrayán debe su origen a la palabra árabe arrayhhan que quiere decir aromático. Esta acepción última se debe sin duda al profundo aroma que sus flores desprenden en su época de floración.
¿Donde encontramos el mirto?
El mirto es un pequeño árbol, o mejor dicho un arbusto. Lo podemos encontrar por toda la Europa meridional, el arco mediterráneo y el norte de África. Como podemos observar por su hábitat natural necesita una temperatura suave para desarrollarse.
Aguanta enormemente bien las sequías propias del clima mediterráneo sobretodo en verano. Por el contrario si debemos destacar a su pero enemigo este es sin duda el frío extremo. No lo soporta y le lleva a la muerte sin remedio.
Se encuentra cómodo en solanas secas y en bosques de pinos que son tan típicos en todo el clima mediterráneo, tanto interior como de costa.
Características del mirto.
Como hemos dicho el mirto es un arbusto. Su hoja es perenne por lo que no pierde la hoja en ninguna estación del año. Con multitud de ramas que lo hacen muy denso puede llegar a crecer en las condiciones adecuadas hasta cuatro o cinco metros de altura.
Sus flores son blancas y muy olorosas. Miden alrededor de dos o tres centímetros de diámetro. Destacan a la vista cuando las observamos sus numerosos y grandes estambres que la caracterizan enormemente.
Por último nos obsequia con un pequeño fruto de alrededor de un centímetro de un color oscuro que podemos identificar como azul oscuro o incluso describir como negro azulado. Este fruto es comestible.
¿Se puede cultivar el mirto en casa?
Sin duda la respuesta es si. Es más, por sus características es muy adecuado para convertirlo en un bonsai siguiendo las técnicas que conocemos gracias a los japoneses.
Pero también es recomendado por los jardineros para cultivar en jardín o terraza. No es muy habitual lo cual es una pena. Si lo cultivamos de esta manera gozaremos de sus bellas flores, pero en los días de más intenso calor también disfrutaremos de un intenso y agradable aroma.
Este arbusto no requiere unos cuidados muy especiales. Podemos utilizar un recipiente de cincuenta o sesenta centímetros de diámetro. También la podemos colocarla en jardines, pero debemos esmerarnos en la poda para que no parezca que nos invade el bosque.
Lo mejor es colocarla en un lugar donde le de el sol. Debemos tener la precaución de que, si nuestro clima es realmente cálido, sea en un zona de semisombra para que no se seque.
Otra precaución a tener en cuenta es para climas que sean fríos y donde hiele en invierno. Si la tenemos en maceta podemos retirarla a un lugar interior para que no se muera en invierno.
Cuidados que necesita el mirto.
Como hemos dicho no necesita un cuidado muy especial más allá de la temperatura. La tierra en que lo plantemos es mejor que sea mezcla de tierra de jardín arenosa y tierra de hojas.
También es importante que tenga un buen drenaje. En caso contrario ahogariamos a nuestra flor. En otoño e invierno necesita poca agua. Con regarla cada cinco o seis días es suficiente. En verano lo haremos cada tres o cuatro días calculando el agua según el tamaño que tenga el arbusto.
El tamaño del arbusto lo controlaremos con nuestra personal poda. No hay que tener miedo en podarlo para controlar su tamaño porque la planta siempre estará sana y fuerte.
¿Que ha significado el mirto a lo largo de la historia?
El mundo clásico.
El mirto es una planta que al ser originaria del arco mediterráneo ya convivió con los habitantes de la Grecia clásica. Allí se relacionaba con Afrodita o Venus para significar fecundidad, pero también fidelidad.
Roma continuó asignándole este significado de fertilidad. Ya nos explica Ovidio que con sus ramas se «azotaba» a las mujeres en las fiestas de la Bona Dea. La finalidad de esta acción era también aumentar su fertilidad.
El mirto y el cristianismo.
El cristianismo cambió el significado de esta bella flor. Entre los primeros cristianos se usaba para coronar a aquellos que adoptaban la religión.
Con el tiempo simbolizó a la virgen. En este caso no era la flor, sino una rama de este arbusto lo que se usaba en señal de virginidad. Relacionado con este significado y a lo largo de centurias se ha empleado en los ramos y adornos de novia sobretodo en el sur de Europa.
Actualmente se sigue usando mayoritariamente en este tipo de adornos y su significado se circunscribe al mundo nupcial. Donde más se observa este uso es en el mundo judío. Aquí es el símbolo del matrimonio.
Utilización del mirto.
El uso principal del mirto, más allá de su uso ornamental es medicinal. Sus hojas y bayas contienen mirtol. El mirtol es muy antiséptico y se usa principalmente en afecciones respiratorias.
Por otro lado hemos hablado ya del aroma del mirto. El aceite obtenido de hojas, frutos y flores se usa en perfumería.
La cocina es otro de los destinos de esta planta. En este caso sus frutos se pueden usar como condimento en algunos platos. Incluso se obtiene un licor con este fruto.
La madera, si tiene el tamaño adecuado también es usada como adorno. Es posible obtener, con la técnica adecuada, pequeñas tallas fabricadas en torno.
Ya os hemos presentado el mirto, una más de las flores que conocemos en nuestro blog.