Diagnóstico del duelo complicado.
El duelo normal y el cuelo complicado.
El duelo es un proceso que todos aquellos que hemos sufrido la pérdida de un familiar, un amigo, un vecino hemos sufrido. El grado en que nosotros como humanos sufrimos esta pérdida depende de muchos factores propios y aledaños a nosotros. Su diagnóstico es difícil para nosotros.
El duelo es una respuesta normal a la pérdida, y en modo alguno todo el mundo necesita una intervención o consejo de un experto para procesarlo correctamente.
En este artículo no intentamos convertiros en psicólogos o terapeutas. Simplemente intentamos explicar de manera breve que es y como se puede realizar un diagnóstico del duelo complicado.
Porqué hay duelo complicado.
Perder a un ser querido es una de las peores experiencias que pueden ocurrirnos a cualquiera de nosotros. Cuanto más cercanía tanto física como emocional tenemos con una persona más fuertes son nuestras emociones.
Para algunas personas, por diversas causas, estas sensaciones no mejoran con el tiempo. Pueden sufrir unas serie de síndromes que deben observar un profesional para llegar a un diagnóstico.
En unas casos puede tratarse de sentimientos encontrados en la misma persona. Hay que ver también ante que persona nos encontramos ya que no es lo mismo para un anciano , un niño o un adolescente.
En algunos casos no hace falta ni que exista un fallecimiento para que se produzca un diagnóstico de duelo complicado, lo llamamos duelo anticipado.
El duelo complicado exige un diagnóstico. Existe porque cada uno de nosotros afronta de manera diferente el hecho de un muerte y su posterior duelo. El diagnóstico es difícil y el tratamiento más.
Ayuda de un profesional.
En todos los artículos de nuestro blog de floresparafunerales siempre hacemos una advertencia. Nosotros no somos profesionales de la medicina. En el caso de observar cualquier comportamiento que consideramos que no se corresponde con un duelo normal hablemos con el doliente.
Debemos convencerle de que lo que está pasando no es lo que debería de pasar y que debe acudir a un terapeuta que realice un diagnóstico adecuado.
¿Qué factores nos hacen vulnerables al duelo complicado?
Hemos investigado en diversos estudios que analizan el diagnóstico del duelo complicado y hemos observado que son comunes en algunos aspectos.
Estos factores que pueden potenciar la complicación del duelo son de diversa naturaleza. Las causas pueden ser varias, vamos a intentar explicarlas brevemente.
Naturaleza de la muerte.
Muerte a edad no natural.
Muerte que se produce a una edad en que la muerte no es habitual. Una persona a lo largo de su vida tiene unos conceptos preconcebidos. La muerte de una persona, en nuestro intelecto, debe producirse cuando uno es anciano.
En el momento en que este hecho no es así y se produce a una edad más temprana el shock es mayor. Cuando un padre sobrevive a su hijo el proceso de duelo puede tener un diagnóstico de complicado.
Aquí podríamos colocar el duelo perinatal y neonatal.
Muerte inesperada.
También aumenta las posibilidades cuando la muerte se produce súbitamente. Quien no conoce el caso de un chic@ que de viaje, yendo al instituto o la universidad o en cualquier otro traslado sufre un accidente y muere.
Es fácil de entender que para toda la familia y amigos el choque de una muerte tan repentina produzca efectos negativos más potentes que la muerte de un anciano tras una larga enfermedad por ejemplo.
Muerte traumática.
El efecto es parecido si la muerte es, como dicen los expertos traumática. Con muerte traumática nos referimos a muertes con características muy desagradables o traumáticas para el fallecido. Si por ejemplo el sufrimiento es extremo las consecuencias también son extremas.
Tras un correcto diagnóstico también puede ser tratado.
Muerte estigmatizada.
En este caso estigmatizada es igual a rechazada. Vamos a poner el ejemplo más habitual y clarificador.
Durante largo tiempo en la sociedad occidental el suicidio ha sido rechazado sin paliativos. Cuanto más nos alejemos en el tiempo más. Hasta el punto de que la iglesia no ha permitido el entierro en los cementerios cristianos de los fallecidos por esta causa.
Todos aquellos cercanos al suicida son sensibles a sufrir un duelo complicado.
Muerte traumática.
Todos los ejemplos anteriores son, sin duda, ejemplos de muerte traumática. En este caso nos referimos a problemas que no están relacionados directamente con la enfermedad que causa la muerte sino con como se desarrolla dicho proceso.
Queremos decir que si durante el proceso del enfermo se producen hechos como un mal diagnóstico por parte de los médicos, malas relaciones con el personal del hospital o la residencia y otros relacionados con el tratamiento de la enfermedad puede producir efectos negativos y duelo complicado.
Factores personales de la persona en duelo.
Vamos a hablar en este punto de factores del doliente que pueden sufrir diagnóstico de duelo complicado.
Edad.
Si a un niño se le muere uno de sus progenitores es fácil de entender que no consiga superar de manera natural en algunos casos este hecho.
Si el doliente es muy joven siempre hay que andar con mucho tiento desde el primer momento, es decir, desde el momento en que lo comuniquemos la muerte.
Ya hemos dicho en algún artículo de nuestro blog, por ejemplo, que no es bueno apartarlo de todo el proceso del funeral.
Trastornos psiquiátricos.
Si una persona ya ha sufrido con anterioridad cualquier enfermedad de índole mental vamos a intentar ayudar. Hablamos por ejemplo con personas con tendencia a la depresión pero también sirve por ejemplo para el caso de alcohólicos.
Vigilemos de cerca cualquier reacción que nos pueda dar a entender que vamos a estar ante un caso de duelo complicado.
El caso de varios fallecimientos seguidos.
Cuando una persona sufre en un período de tiempo relativamente corto la pérdida de varias personas puede que no lo aguante. Es un golpe muy duro que puede conllevar un duelo difícil de llevar.
Toda la familia debe estar unida y ayudarse unos a otros, y en caso necesario acudir a un profesional.
Diagnóstico de duelos complicados con anterioridad.
Por último, si en casos anteriores de fallecimientos de un ser querido no hemos resuelto el tema con naturalidad puede volvernos a ocurrir.
Tanto la persona afectada, el doliente, como sus allegados y amigos deben velar porque el proceso sea lo más natural posible. Cuando nos referimos a natural no nos referimos a rápido. Cada persona tiene sus tiempos y plazos. Así que las fases que unos superan en días o semanas para otro puede durar meses.
Pero las fases deben ir discurriendo una tras otra hasta la resolución del duelo.
Relación con el difunto.
En este caso puede suceder dos situaciones que llevan a dos escenarios diferentes.
Dependencia del fallecido.
El primer caso es el de una relación con el fallecido sea muy fuerte. Esta relación no tiene porque ser a nivel afectivo.
Puede ser a nivel profesional. Cuando una persona está acostumbrada a colaborar muy estrechamente con alguien a nivel laboral puede existir un diagnóstico de duelo complicado.
También puede ocurrir por una dependencia económica. Si vivimos de la pensión de uno de nuestros padres o abuelos y este desaparece podemos sumirnos en un estado de duelo complicado.
Duelo ambivalente.
Del duelo ambivalente ya hemos hablado en otro artículo de nuestro blog. Básicamente se trata de que la persona que desaparece y el doliente han tenido una relación complicada. Por diversas causas puede haber sentimientos encontrados respecto a esa persona desaparecida.
La familia y la sociedad.
Los pilares que nos sostiene habitualmente como personas. Si todo transcurre con normalidad no hay problema, pero en caso contrario…
Familia desorganizada o que no da un soporte adecuado.
Hoy en día puede suceder que las relaciones familiares no sean tan fuertes como en otros tiempos anteriores. Por alejamiento geográfico, por malas relaciones o conflictos dentro de ella pueden darse diversos problemas durante el duelo.
Aislamiento social.
Este caso puede producirse en cualquier caso. El hecho de comportarte o ser de una manera determinada puede llevar a que estés totalmente aislado en este planeta superpoblado.
El mejor ejemplo es el de un inmigrante fuera de su país y recién llegado al nuevo.
Economía.
La falta de recursos económicos es otra posible situación que lleve al diagnóstico de un caso de duelo complicado.
Hoy en día todo tiene un precio en esta sociedad. Lo hemos visto cuando hablábamos de que nos puede costar un entierro en España.
La falta de recursos puede llevar también a un aislamiento y a un estado anímico que no ayude a superar el duelo.
Esperamos haberos ayudado a ver cuales son las causas que pueden llevar al diagnóstico de un duelo complicado.